Una parte importante de su salud y aseo general es mantener limpias las orejas de su perro; esto puede prevenir o tratar posibles problemas de salud, como una infección. Sin embargo, limpiar las orejas de tu perro puede ser difícil, especialmente si nunca lo has hecho antes. La frecuencia con la que debe limpiar los oídos de su cachorro será determinada por su veterinario. Si su perro desarrolla una infección, también puede ser necesario limpiarle las orejas. Debido a que el cuidado de los oídos para perros es esencial para su bienestar, es crucial que se realice correctamente para evitar lesiones o daños a los oídos.
¿Por qué es importante el cuidado de los oídos del perro?
Los oídos de los perros son sensibles y, a medida que la cera y los aceites se acumulan dentro del oído con el tiempo, pueden volverse cada vez más propensos a sufrir infecciones. Los factores externos como el exceso de humedad o las alergias pueden elevar aún más el riesgo de infecciones. Los signos de que su perro puede haber desarrollado una infección de oído incluyen:
- Mal olor alrededor o dentro del oído.
- Secreción del oído
- Hinchazón o enrojecimiento del canal auditivo.
- Excesivo manoteo o rascado de las orejas.
Si nota alguno de estos síntomas, programe una cita para un examen y limpieza de oído con su veterinario de inmediato.
¿Cómo comprobar la infección de los oídos de tu perro?
Es recomendable examinar los oídos de su perro una vez cada semana para identificar signos de irritación, infección, suciedad, sensibilidad y parásitos como los ácaros del oído. Buscando enrojecimiento, secreción, suciedad o acumulación de cera. Para familiarizarse con el estado de salud general de su perro, es fundamental observar e inspeccionar regularmente sus orejas. Si su mascota cambia su aspecto de las orejas o reacciona al examen de las orejas, esto puede indicar la necesidad de una investigación más profunda, es decir, un examen veterinario. Los síntomas de una infección incluyen:
- Hinchazón o inflamación (las orejas están calientes al tacto)
- Enrojecimiento o formación de costras en la piel de la orejera
- Secreción descolorida (amarillenta o marrón rojiza)
- mal olor
- Malestar o dolor cuando se tocan los oídos.
- picazón en los oídos
Siempre consulte a su veterinario si sospecha una infección o malestar, ya que cualquier problema que no se diagnostique puede provocar la progresión de los síntomas y posibles problemas a largo plazo. Por lo general, los problemas de oído en los perros están presentes debido a una causa subyacente, como la conformación de la oreja, alergias, parásitos, etc., que deben corregirse para que el problema del oído no vuelva a aparecer.
¿Cómo limpiar las orejas de tu perro en casa?
¿Es esta la buena noticia? En primer lugar, la limpieza y el cuidado regulares pueden ayudar a prevenir las infecciones de oído. Aprenda a inspeccionar las orejas de su perro con frecuencia, como una vez por semana o cada dos semanas. Su cachorro se sentirá cómodo cuando le toquen las orejas porque esto lo ayudará a identificar posibles problemas a tiempo.
Para limpiar los oídos de su perro en casa, deberá seleccionar un limpiador de oídos suave formulado para mascotas. Mantenga la orejera de su perro en posición vertical y gotee una pequeña cantidad de solución limpiadora en el canal auditivo. A medida que el limpiador se filtra en el canal, utilice los dedos para masajear la base de la oreja durante unos 15 a 20 segundos.
Es posible que su perro quiera negar con la cabeza una vez finalizada esta parte del proceso de limpieza; una toalla puede ayudar a evitar ensuciar. Utilice una bola o almohadilla de algodón limpia (pero no un hisopo de algodón, que podría dañar los oídos de su cachorro) para limpiar el exceso de solución y el cerumen suelto.
¿Con qué frecuencia debes inspeccionar y limpiar las orejas de tu perro?
La necesidad de inspeccionar los oídos de un perro varía significativamente de la frecuencia necesaria para limpiarlos. Aunque inspeccionar los oídos de su perro una vez a la semana es una buena idea, generalmente no es necesario limpiarlos más de una vez al mes. También debes considerar si tu peluquero limpia las orejas de tu perro. En un perro con oídos normales y saludables, una limpieza de oídos de rutina no debería ser necesaria más de una vez cada uno o dos meses.
Si se requiere una limpieza más frecuente, esto debería ser motivo de preocupación. Además de la limpieza de oídos de rutina programada, es una buena idea realizar la limpieza de oídos de su mascota después de cada baño o después de actividades acuáticas como nadar, jugar en la playa o en el lago. Esto ayuda a limpiar los oídos en caso de que se haya introducido humedad excesiva en los canales auditivos durante el baño o el tiempo de juego.
La técnica de limpieza de orejas del perro
Para ayudar a su perro a relajarse, ofrézcale golosinas, juguetes y masajes en el vientre con palabras tranquilizadoras. Cuando su perro esté perezoso o cansado y tenga tiempo suficiente para completar el procedimiento, es beneficioso elegir un momento tranquilo y relajado. Como resultado, es mejor evitar la limpieza si no se tiene el tiempo o la paciencia adecuados. Es mejor hacer esto en el baño o en el vestíbulo de la casa porque puede resultar complicado dependiendo de lo interesado que esté tu perro en que le limpien las orejas.
Dado que a los perros puede que no les guste especialmente que les limpien los oídos, debes intentar que la experiencia sea lo más positiva posible. Asegúrese de que todos sus suministros estén cerca para no interrumpir el flujo de cosas durante la limpieza del oído. Existen dos técnicas de limpieza de oídos comúnmente utilizadas:
- Primero, limpie la solapa exterior de la oreja, incluidos los pliegues, con un enjuague para oídos o una bola de algodón. Comenzando por el exterior y avanzando hacia adentro, use una bola de algodón nueva o una gasa fresca para el canal auditivo siempre que el cachorro se sienta cómodo. Tenga cuidado de no profundizar demasiado o tocar demasiado agresivamente el canal auditivo. Repita para eliminar cualquier residuo de cera o suciedad.
- El segundo método consiste en aplicar una pequeña cantidad de solución limpiadora de oídos a los oídos de su perro, masajear la base de los oídos y dejar que sacuda la cabeza para ayudar a eliminar los restos del interior. Limpiar suavemente el interior del canal auditivo con una bolita de algodón o un dedo cubierto con gasa. Repita para una limpieza profunda. Intenta trabajar de adentro hacia fuera usando algodón nuevo cada vez hasta que salga limpio. Limpiar los pliegues y la orejera al final.
Una vez que hayas terminado de limpiarle las orejas, mima a tu perro con más golosinas, caricias, abrazos y palabras tranquilizadoras. El refuerzo positivo contribuye en gran medida a garantizar que su perro esté listo y dispuesto para la próxima limpieza de oído.
¿Cómo limpiar las orejas de tu perro?
Asegúrese de tener todos sus suministros al alcance de la mano. Tenga un limpiador, bolas de algodón o toallitas aprobadas para mascotas.
- Tenga apoyo: Es posible que necesite que otra persona lo ayude a limpiar sus oídos si su perro no está acostumbrado a hacerlo. Coloque un brazo alrededor de su cuello para sujetar a su perro. Para estabilizar suavemente su cabeza o la mitad posterior de su cuerpo, use la otra mano.
- Espere un desastre: hasta que sepa cuánto peleará o se moverá su perro, limpie las orejas de su perro afuera o en un lugar que sea fácil de limpiar. Una toalla puede resultar útil para mantener limpio el resto del cuerpo.
- Sea amable: sostenga con cuidado la parte exterior flexible o erecta de la oreja de su perro, que está formada por pelo, piel, cartílago y vasos sanguíneos (pabellones auriculares). Esto permitirá la entrada a su canal auditivo.
- Utilice su limpiador: llene el canal auditivo con su limpiador de oídos aprobado por su veterinario. Asegúrese de que el limpiador de oídos para perros llene tanto el canal auditivo horizontal como el vertical. Masajee suavemente la base de la oreja de su perro mientras mueve lentamente la mano hacia arriba para masajear todo el canal auditivo.
- Permita que su cachorro lo sacuda: su perro sacudirá la cabeza. Agitar le permite a su perro expulsar la mayor parte del limpiador y la cera por sí solo.
- Limpieza: Para limpiar la mayor parte del canal auditivo que pueda ver, use una bolita de algodón limpia. No coloque la bola de algodón en los oídos de su perro. Esto evitará que la bola de algodón se atasque y evite lesiones. Repita el enjuague y limpieza hasta que la bola de algodón esté limpia y el canal auditivo de su cachorro no tenga más secreciones. Es posible que tenga que enjuagar tres o cuatro veces si hay muchos desechos.
Mantener limpias las orejas de su perro no es sólo una cuestión de higiene: le ayudará a detectar problemas a tiempo. Si nota cosas como enrojecimiento, suciedad pesada y frecuente, olor o dolor, es hora de dejar de lado la limpieza rutinaria en casa y comunicarse con su veterinario. Esto puede ayudarle a cortar un problema de raíz y evitar que se desarrolle una infección y un dolor más graves en su cachorro.